01 marzo 2007

NACHO LIBRE (2006) - Jared Hess


Créanme: vivo relativamente cerca de un convento, en el que está al lado del Centro Gumilla en Altagracia, y las monjas no son como Ana de la Reguera. Usan medias panties gruesas, marrones y horribles, por no hablar de los zapatones Tom Sailor. Dicho esto, lo que me fascina de NACHO LIBRE es su carácter de producto culturalmente híbrido: canciones como "Mucha muchacha" de Juan García Esquivel junto a cierta estética de disco music decadente; las botas blancas, las camisas con cuello de "V" y los faralaos a lo Carmen Miranda de un Nacho —mestizo monacal nacido de un pecado mexico-escandinavo— que conmovedoramente trata de impresionar a las pupilas de Sor Encarnación; Esqueleto (Héctor Jiménez), casi un personaje de Condorito, afirmando su fe en la ciencia . Este es el tipo de cine que tiene que hacer Jack Black, épicamente renegado y libertario, y olvidarse de cosas grandilocuentes tipo KING KONG. Para mí, la escena inolvidable de NACHO LIBRE es aquella en la que desfilan diapositivas informativas de los gladiadores, antes del combate colectivo en el que Nacho quedará subcampeón: Silencio, Muñeco, Dynasty, El Chino. A través del recurso estético, se logra plasmar toda la nobleza grotesca del Cachacascán y sus esperpentos que se inventan un otro yo heroico. Cómo olvidar mi entrañable experiencia entrevistando a los titanes vernáculos de la lucha libre cuando tuvieron una fugaz pasantía por el estudio gigante en Boleíta del desaparecido canal Marte, hoy en día La Tele: Chiclayano Junior, el Rapaz de Portugal, Pete el Conde y tantos otros amigos. Tres meses después, aún nos dedicaban peleas por TV al fotógrafo y a mí que les hicimos un reportaje en la prensa. NACHO LIBRE me sorprende en el momento en que creo que tengo más kilos que en ninguna otra etapa de mi vida, y la sentí como una reivindicación de la panza. A su modo, Jack Black puede ser terriblemente sensual, y se pasa casi toda la película con su honesto torso al aire, digno y sin artificios. Por no hablar del tiernísimo Chancho (Darius Rose). Por fin: ¿Ercarnación habrá quebrado su voto de castidad?

No hay comentarios.: